Le presto tibuna a mi amiguis " M"

Corte y se me había olvidado decir algo, pero no podía volver a llamar porque mis palabras me condenaban nuevamente. Así que tuve que controlar esas ganas locas de llamar y esa rabia que sube por las venas hasta llegar a la cabeza, igual que la sangre que se acumulaba cuando era chica y hacía la invertida y me quedaba así hasta que la sangre retumbaba en mi cabeza. Pero esta vez no era la sangre,sino una palabra que no mencioné..perdón por que estás dolido y por tu dolor, perdón porque no me invitaste a tu fiesta de cumpleaños y perdón porque estás en el día de tú cumpleaños sin mi, perdón porque finalmente logré que pudieras vivir sin mi...y perdón porque te di tantos argumentos que en resumen decían una sola palabra que nunca mencioné...perdón y que tú si mencionaste...Y te dejé ir.
M.-

No hay comentarios.: