Reunion de Curso

Yo andaba tranquila por la vida trabajando como china pal titulo y saliendo a respirar un cafecito los viernes por Lastarria en compañía de las amigotas de siempre hasta que llegó la invitación….”queridos compañeros, la generación del 95 se junta pa celebrar sus 10 años! desde que salimos del colegio; la reunión será el 17 de diciembre a las….bla, bla,bla… habrán profes invitados…bla, bla, bla…. puedes ir con “pareja” (jajaja, perdón!) bla, bla, bla... fin” (solo faltó lleven a los niños!!!) Sin afán de darme lastima (borré hace tiempo la palabra víctima de mi diccionario individual), y menos aun de autocompadecerme, llegué a mi casa, me lavé la cara, y busqué a la Consuelo de los 18… increíblemente seguía ahí; los mismos ojos sonrientes, los mismos principios, los mismos sueños… Empecé a recapitular pensando en lo que ha sido de mi vida estos últimos 10 años…. turismo universitario heavy en 2 carreras que finalmente me llevaron a mi destino arquitectónico sin acumulación de millas (cero ramo homologado) y con alguna que otra escala…. el intercambio en Brasil, el Proyecto Fondart, Looooool, etc, etc, etc. Y en general me pareció que el laaargo camino recorrido no habia sito tan largo, y de todas formas, terriblemente entretenido (sobretodo estos últimos años), trasnochado y bien llorado también, pa que estamos con cuestiones. Después de pensarlo un poco (no mucho porque a estas alturas tengo las neuronas medio fundidas) decidí que de todas maneras iba a ir (ah! Pablo, es tu cumple parece cierto???) y lo iba a pasar chancho y de paso reivindicarme un poco, porque en el colegio, de entre todos los ñoños más ñoños del mundo, yo era la presidenta; me senté siempre adelante (bueno, el promedio 6.9 de enseñanza media fue por algo…) y creo que muy pocas veces hice desorden; nunca anduve con ningún compañero, y si a alguien le gusté, me encerré en el baño recreos enteros porque me daba vergüenza; nunca usé frenillos ni lentes (lo miope me vino en la U) pero los libracos que leía me escondían de lo más bien, así que logré mimetizarme increíblemente con los bancos y la pizarra, pasar invisible entre medio de mis compañeros cuando se ponían en la puerta dando agarrones a las niñas (a mi no, yo era libro) y mi deseo más absoluto durante los recreos era correr a la biblioteca, de la cual era “ayudante de bibliotecaria” lo más rápido posible... no fuera a ser que alguien me fuera a quitar el puesto…jajajajaja… seguro…. Lo que siempre tuve, eso si, fue lo de cuentera y buena pal tollo, así que por ahí por 7° cobraba $100 por carta romántica a mis compañeras, y si era de perdón $200 (porque tenía que usar más adjetivos). Además siempre cultivé la ironía, sobre todo cuando llegaba a un curso nuevo a mitad de año y llegaba contando que mi promedio era 5.0, así nadie se sentía intimidado y cuando me empezaba a sacar los 7 todos me felicitaban, hasta que al final del año, cuando me daban el 1° lugar, mi mamá no se emocionaba y me decía “muy bien, como siempre” y ahí me pillaban mis compañeros, pero no importaba, porque me iba el otro año a un colegio nuevo. Creo que por eso quiero ir a este encuentro de viejos estandartes, pa reivindicarme un poco, pa tirar por fin la talla con mis compañeros de colegio (porque en la U… osea!) y pa sapear otro poco en sus vidas y cachar que fue de ellos en estos 10 años…. solo me queda una pura duda… voy con lentes??? En otras palabras…voy con mi pinta de ñoña evolucionada haciendo gala del espíritu que siempre me acompañó…o de plano sorprendo y cambio el look???... Hagan su propuesta….

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